Después de año y medio trabajando en JB Entertainment, el rapero y productor tapatío Malafama, fue despedido en agosto de 2019 por JB Castro, propietario y director general de la empresa discográfica. Según señaló Malafama, no había motivo real para removerlo de su cargo, que era el de administrador y director de operaciones, además de que no se le pagó su último mes de trabajo.

Ayer 25 de febrero, ambos tenían una cita en el juzgado de Guadalajara para intentar llegar a un acuerdo en esta demanda laboral, en la que el trabajador solicita a la empresa la cantidad de $50 mil pesos como indemnización por despido injustificado. Aparentemente en un comienzo JB Entertainment ofreció el pago de $14 mil pesos, pero fueron rechazados.

Lo que ocasionó que Malafama hiciera pública esta disputa después de seis meses, fue que ayer JB Castro no se presentó en el juzgado; envió a su abogado que negó toda relación laboral. JB Castro también se defendió de las acusaciones: “¿No se te hizo un poco avaricioso pedir tanto dinero? A lo mejor si fueras justo no anduvieras en redes quejándote. Tus abogados valen verga y por eso andas aquí de panchero“.