Esto fue Sharif en CDMX (Fotos)

(Ciudad de México).- El otoño es de esas temporadas en las que el ambiente se vuelve un poco más frío, las hojas caen de los árboles y pintan las calles de un color rojizo. Se acerca el final del año, la madurez, la melancolía, el intimismo y la introspección se hacen presentes. La música de Sharif tiene mucho que ver con eso y con el otoño; pareciera que no es casualidad que hayan elegido esta época del año para hacer su gira por México y Latinoamérica.

Promocionando su disco “Acariciado Mundo”, Sharif se presentó el pasado 9 de noviembre en el Auditorio BlackBerry, en el corazón de la colonia Condesa de la Ciudad de México. Con un escenario sencillo, monocromático, el rapero originario de Zaragoza, España, ofreció un concierto íntimo, personal y entregado. Característico de su sencillez, Sharif apareció al punto de las 9 de la noche con una playera gris, sin ningún logotipo, la cual poco a poco dejaría empapada de sudor.

Durante el concierto interpretó temas clásicos y nuevos, como lo fueron “Plegaria”, “Lo Que Nunca Ha Sido Mío”, “R.O.N.R.O.N.E.A.”, “El Callejón de los Milagros”, “La Primera Persona del Plural” o “Culpable”, que junto con “La Traición”, fueron los dos temas más coreados. McKlopedia de Venezuela apareció para colaborar en “El Llano En Llamas”, para después cantarnos un par de rolas de su autoría. Uno de los tracks que cerraron la noche y una de las canciones más esperadas, fue “Dorian Grey”, un retrato personal de la vida de Sharif.

Pero no todo fue hip-hop, “El Incréible” también nos regaló un par de poemas suyos, incluidos en su poemario “Amor y Desamor”. También nos anunció que está trabajando un disco en conjunto con Morgan. Sharif Fernández es un rapero que nació con un sonido maduro, bien diseñado, inteligente y compuesto de tal manera que sus canciones, a pesar de hablar de sentimientos inflamados, no suenan para nada cursis o falsas, al contrario, conectan perfectamente con la gente. Sin duda, esa noche el zaragozano dejó un pedazo de su alma en México.

Por: Ericka Reyes | Fotos: Leonel Hernández